¿Quién le explica al algoritmo que esto no es una pipa?
El algoritmo está triste. Ha aprendido a reconocer objetos. No se le da del todo mal identificar expresiones faciales. Está empezando a distinguir con acierto contenidos violentos u ofensivos. Extrae textos, detecta logotipos, localiza estructuras famosas, diferencia los colores… Pero la obra de Kandinsky no le dice nada.