El doble filo de los robots asesinos
En la mitología celta, Taranis era el dios del trueno. El Thor de los galos. En la industria de la guerra, Taranis es un arma autónoma: un avión de combate que no necesita ayuda humana para levantar el vuelo, recopilar información, desplegar armas en territorio enemigo y volver a casa. Pero sí necesita autorización: «En todo momento Taranis estará controlado por un equipo de tierra altamente capacitado», asegura BAE System, fabricante líder en este proyecto que aún está en pruebas.