Slack, mejor ‘startup’ de 2016
Silicon Valley se esfuerza por hacer las cosas como el resto del mundo, pero no siempre le sale. Intentan hacer una gala para consagrar lo mejor del sector y para ello toman un espacio noble, como es la Ópera de San Francisco, edificio señorial enclavado entre el deslumbrante ayuntamiento, el ballet y la filarmónica. Cuando comienzan a llegar nominados, invitados y demás protagonistas de esta pujante industria, todo se desmorona al ver el atuendo. Aunque hubo que asistió de etiqueta, abundaron los chalecos de plumas, las zapatillas de deporte y el atuendo deportivo. Más que una gala, parecía un grupo de excursionistas listos para hacer senderismo.